Así reaccionó Maradona en momentos cruciales de la historia
Ya pasaron cinco años desde que Diego dejó el plano terrenal. Cinco años en los que ante cada tema de debate, la pregunta de cómo hubiese actuado reflota, porque dentro de su faceta de ídolo, también estaba contemplada la de gurú popular.

Ya pasaron cinco años del fallecimiento de Diego Armando Maradona, desde entonces, la vida se vio obligada a continuar sin uno de sus protagonistas. En este lustro hubo infinitas polémicas, alegrías, locuras y controversias que despertaron en la cancha, en la mesa o en las redes, un generalizado: "¿Qué hubiera hecho Maradona?". Durante sus 60 años de vida, el Diez compartió su cosmovisión sobre eventos cruciales de la historia reciente.
Guerra de Malvinas

En los tiempos corrientes se le suele pedir acción política a los futbolistas, y eso a Diego no le faltaba. Corría el año 1982 y la Selección Argentina se preparaba para el Mundial de España, en plena Guerra de Malvinas. Para recaudar fondos, se realizó un programa de televisión llamado Las 24 horas de Malvinas, al que asistieron las más grandes estrellas de la época. En representación de los vigentes campeones mundiales, llegaron desde la concentración Daniel Passarella, Osvaldo Ardiles, Patricio Hernández y el Pelusa, que acababa de convertirse en el futbolista más caro de la historia y realizó una donación personal de 100 millones de pesos. Durante esa misma emisión, expreso su deseo de jugar un partido de fútbol para los soldados en las Islas, que finalmente nunca pudo consumarse.
Maradona, que conmovido, dijo que estaría dispuesto a dar la vida por la causa, como todos los presentes, dio algo aún más valioso y que quedaría grabado para siempre en el patrimonio cultural de la humanidad. Concretamente cuatro años más tarde, en el Mundial de 1986, marcando los dos goles más increíbles de los que se tenga registro, ante Inglaterra, en el Estadio Azteca.
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Vuelta a la democracia

Un año más tarde, en el mes de septiembre, Diego sufrió una de las patadas más fuertes de su carrera, propinada por Andoni Goikoetxea, que lo lesionó y alejó durante más de 100 días de los terrenos de juego. Para su recuperación, decidió viajar a Argentina y su fecha de regreso coincidió con la victoria de Raúl Alfonsín en las elecciones y la vuelta del país a la democracia.
Recién llegado, el ídolo sentenció: "Hay que defender siempre lo que uno siente, y lo que los argentinos sentimos y merecemos es la democracia. Siento y defiendo los problemas de los argentinos. Defiendo lo que quiere el pueblo, pero no me siento un héroe, me siento un argentino más".
Atentado a las Torres Gemelas

El 11 de septiembre de 2001 la historia cambió para siempre con el atentado a las Torres Gemelas, el golpe más fuerte que jamás se le ha realizado a los Estados Unidos, con autoría intelectual de Osama Bin Laden. Al respecto, el Diez, que se encontraba en Cuba tratando su adicción a las drogas tras un fatídico año 2000 en el que casi pierde la vida, declaró: "Si matan a uno de ellos se arma un lío bárbaro, pero matan a 10.000 iraquíes y nadie dice nada ¿En que mundo vivimos? Nos prometieron que iban a encontrar al culpable del atentado a la AMIA porque nosotros no teníamos inteligencia, y a los inteligentes le metieron un avión en la cocina del Pentágono". Además, salió en defensa de Fidel Castro y aseguró: "El bloqueo es terrorismo de estado peor que lo ocurrido con Torres Gemelas".
La frutilla del postre llegó poco más de un mes después, cuando en la celebración de su cumpleaños número 41, Diego se disfrazó con una máscara de Bin Laden, cuando este era aún el hombre más buscado del mundo. Con esa misma careta, jugaba al paintball en el hotel los días previos a su partido homenaje en noviembre de 2001, aquel en el que dijo que la pelota no se mancha.
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Crisis de 2001

Tan solo un mes después, Diego se pronunció sobre la crisis del 2001, autopostulándose como vice y compañero de fórmula de Carlos Saúl Menem de cara a las elecciones del 2003, con la intención de que Eduardo Duhalde no llegara al poder: "El que no vota es un cagón, hay que involucrarse por más que la política sea jodida por todo lo que nos chorearon, a mí los políticos no me gustan, la gente sufre y la cosa está jodida, no podemos esperar que los americaninos solucionen todo con bombas y aprietes. Si alguien lo puede solucionar somos nosotros" . Finalmente no pasó ni una cosa ni la otra y Néstor Kirchner, también de su simpatía, fue presidente.
En ese mismo contexto, se expidió contra los bancos y el Corralito: "A la gente la estan choreando, estos son chorros de guante blanco, si se los puede llamar así, se te meten en tu casa, te dicen que vas a comer y que vas a hacer con tus hijos. Es la plata que la gente se ganó laburando, no choreando como ellos, todos se olvidan de los que no conocen un banco, como los de Fiorito y las villas".





