Zverev confesó una fuerte crisis anímica tras quedar eliminado en Shanghai
El alemán cayó ante Arthur Rinderknech en la tercera ronda del Masters 1000 y reconoció que sufre dolores físicos y duro bajón mental.
El Masters 1000 de Shanghai volvió a sacudir el circuito con otra sorpresa: Alexander Zverev quedó eliminado ante Arthur Rinderknech (54°) y dejó en claro que atraviesa uno de los momentos más difíciles de su carrera. Tras el tropiezo, el número 3 del ranking habló sin filtro sobre su presente y reveló que tanto el cuerpo como la cabeza le están pasando factura.
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El tenista alemán reconoció que convive con molestias desde hace meses, lo que condiciona su rendimiento. “La última vez que jugué sin dolor fue en Australia. Está siendo un año realmente duro a nivel físico, los problemas de espalda no cesan”, explicó. A ese malestar se suma un ánimo por el suelo: “Estoy inmerso en una auténtica lucha contra mí mismo porque tengo una desconfianza enorme en mi juego”.
Zverev profundizó aún más en su confesión y dejó una frase que encendió las alarmas: “Simplemente no creo en mí, carezco de cualquier tipo de fe y confianza en mí mismo. Estoy jugando un tenis terrible y el balance de mi temporada es realmente malo.” No es la primera vez que el alemán expone su vulnerabilidad: en julio, luego de quedar eliminado en su debut en Wimbledon, había declarado que nunca se "había sentido tan vacío” y que no encontraba alegría fuera de las canchas.
El bajón contrasta con el buen inicio de año que había tenido. Zverev llegó a la final del Abierto de Australia mostrando un nivel sólido, aunque fue superado con claridad por el número uno del mundo. A partir de ahí, los resultados se derrumbaron y el ex finalista de Grand Slam no logró recuperar la confianza.
Después del primer semestre, el germano intentó relanzar su temporada con una gira por Sudamérica, donde disputó los torneos de Buenos Aires y Río, aunque no superó los cuartos de final. Más tarde viajó a Norteamérica, donde alternó triunfos y derrotas sin poder sostener la regularidad entre Acapulco, Indian Wells y Miami.
Durante la gira europea sobre polvo de ladrillo, el panorama pareció mejorar: festejó su único título del año en el ATP 500 de Múnich y alcanzó los cuartos de Roland Garros. Sin embargo, la ilusión se desvaneció rápido en la segunda mitad del calendario, con eliminaciones tempranas en Wimbledon y el US Open, además de semifinales sin premio en Canadá y Cincinnati.
El alemán cerrará el tramo final del 2025 con la urgencia de recuperar sensaciones y reencontrarse con su mejor versión. El gran interrogante es si podrá recomponerse mental y físicamente para volver a competir al máximo nivel.
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