Adiós al humo en el asado: un truco sencillo con sal que mejora el sabor de la carne
Un método simple con sal gruesa puede ayudarte a lograr un asado más parejo y con mejor sabor.
En Argentina, el asado es un ritual que se respeta como pocas cosas. Y, como todo buen ritual, tiene secretos que pasan de generación en generación, uno de los más comentados entre parrilleros es el método para evitar el humo excesivo durante la cocción. Conocé los detalles.
Adiós al humo en el asado: el truco sencillo con sal que mejora el sabor de la carne
Este truco no solo tiene que ver con el sabor; la sal gruesa sobre las brasas ayuda a reducir el humo en exceso, estabilizar la temperatura y controlar pequeñas llamaradas. Su uso es sencillo: se espolvorea sal gruesa o entrefina sobre el carbón encendido en el momento justo.
Entre los beneficios más destacados de esta práctica se encuentran:
- Menos humo fuerte: la sal absorbe la grasa que cae sobre el fuego y evita que se queme en exceso.
- Temperatura pareja: prolonga el calor y lo distribuye de forma uniforme en la parrilla.
- Control del fuego: ayuda a sofocar pequeñas llamas sin apagar por completo las brasas.
Además, la sal es un recurso casero seguro para la parrilla siempre que se use en cantidades moderadas y solo para controlar el fuego. No reemplaza un extintor y no debe usarse sobre incendios grandes o de origen químico o eléctrico.
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