Entró a la F1 como camionero y es el nuevo jefe de Colapinto en Alpine
Hombre de confianza de Briatore, Steve Nielsen asumió el lunes como director general. Quién es y qué rol tiene en el equipo del argentino a partir del GP de Italia.
Steve Nielsen es el nuevo director general de Alpine, a partir del lunes pasado. En el Gran Premio de Italia, este fin de semana en Monza, tiene su primera gran aparición con la golpeada escudería de Franco Colapinto y Pierre Gasly -última en el campeonato-, siempre a la sombra del todopoderoso Flavio Briatore.
De bajo perfil, el ingeniero británico de 61 años llegó para reemplazar a Oliver Oakes, que renunció justo antes del cambio que bajó a Jack Doohan y subió al argentino tras la carrera en Miami. Ya se puso al frente y ocupa su lugar en el muro de boxes, aunque Briatore permanecerá como máxima autoridad.
En 1986, tras menos de un año como agente de policía junto a su hermana, Nielsen entró a la Fórmula 1 de forma poco convencional: al mando un camión de la empresa de catering MSL para los invitados de la tabacalera Rothmans. Hizo contactos en el paddock hasta entrar al equipo de pruebas de Lotus y no paró más.
Con distintos cargos, tanto en pista como en los escritorios, pasó también por las estructuras de Tyrrell, Honda y Arrows, hasta que a principios de los 2000 llegó a los brazos de Briatore para ser director deportivo de lo que era Benetton y luego Renault, donde conquistó el bicampeonato mundial de constructores y pilotos en 2005 y 2006 con Fernando Alonso.
Valorado como un experto en cuestiones operativas y de gestión de recursos, Nielsen se fue en 2009 del equipo del Rombo y tuvo experiencias en Caterham, Toro Rosso y Williams hasta que en 2017 fue contratado por Liberty Media -la empresa dueña de la F1- para la dirección deportiva, con un rol de coordinación entre las escuderías y la categoría.
En enero de 2023 dio un paso más hacia arriba y ocupó ese mismo cargo en la FIA, pero se fue a fin de año por diferencias internas. Y en julio de este año aceptó el llamado de Briatore para volver a lo que hoy es Alpine, su segunda casa. Desde Monza, cara nueva y aire fresco al lado de Colapinto, en busca de un respiro para salir del fondo.
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