Por qué recomiendan licuar cáscara de mandarina con bicarbonato y para qué sirve
Esa combinación casera aprovecha el aroma cítrico y la acción del bicarbonato para limpiar, perfumar y eliminar manchas.
La cáscara de mandarina suele terminar en la basura, pero al licuarla junto con bicarbonato se transforma en un aliado casero para el hogar. Esta mezcla aprovecha el aroma fuerte de la fruta y el poder del bicarbonato para neutralizar olores y quitar manchas livianas. Conocé los detalles.
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Efectivamente, la mezcla puede usarse como desodorizante natural, limpiador suave y repelente ligero gracias a sus propiedades combinadas.
Entre sus usos más comunes están:
- Colocarla en la heladera, cajones o rincones cerrados para dejar olor fresco.
- Usarla como pasta para frotar superficies como mesadas, tablas o utensilios.
- Diluida en agua, sirve para limpiar hojas de plantas y mantenerlas brillantes.
- Ayudar a repeler algunas plagas leves gracias al aroma cítrico.
Cómo preparar cáscara de mandarina con bicarbonato
- Lavá bien las cáscaras para eliminar restos de pesticidas o suciedad.
- Cortalas en trozos y colocá en la licuadora con 1 o 2 cucharadas de bicarbonato y algo de agua.
- Licuá hasta obtener una pasta homogénea.
- Usala de inmediato para limpiar o ponela en recipientes pequeños para usarla como ambientador.
Precauciones a tener en cuenta
- No es tan efectiva contra grasa muy adherida, moho o manchas fuertes frente a productos químicos especializados.
- Evitá usarla sobre superficies delicadas, como mármol o maderas barnizadas, porque el bicarbonato puede rayar. Mejor probala primero en un rincón poco visible.
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