Vamos por otro empujoncito, Boca
Con Zeballos figura, Delgado destacado y otro buen ingreso de Ander Herrera, el Xeneize se llevó un triunfazo agónico de La Plata llorado por el WhatsApp millonario, que cuatro horas después, bochorno de Arasa mediante, se quedó sin señal. Ni la falsa guardia alta les queda. ¡El domingo cueste lo que cueste!

A los 40 segundos de partido ya Zeballos mostró que pintaba para otra tarde inspirada: lindo pie a pie y remate desviado para avisar. En un 1T en el que pasó muy poco hasta el minuto final, fue el único que exigió a Muslera, con un buen tiro libre al primer palo. Y en la última de la primera mitad recibió de Palacios en la puerta del área y con un gran control orientado se deshacía de Facundo Rodríguez, que lo quiso frenar con sus brazos afuera, pero el Changuito eludió también el agarrón digno de un maul de rugby, y cuando se iba camino al arquero el defensor lo derribó arrojándose al piso sobre su cuerpo. Penal, que el 7 erró pero debió ejecutarse de vuelta por invasión activa de Núñez, quien le disputa el rebote en el palo a Merentiel.
El 2T empezó con el remate al travesaño del Palacios pincha, en una de las varias pelotas paradas mal defendidas. Y enseguida Boca la movió bien entre el chileno y Blanco, que limpió para Delgado (otra vez en el podio), quien como casi siempre buscó el pase vertical, forzando un rebote que tomó Giménez y habilitó a Zeballos para el 1-0: gran definición de la figura de la cancha.
El Xeneize ni pudo disfrutar de esa ventaja: a los 12’, Medina se metió al área con floja oposición de Belmonte y Barinaga, y cuando se quedaba sin cancha, vio el regalo de Marchesín yendo innecesariamente al piso, se tiró y Rey Hilfer compró. Otro penal carancheado y evitable como ante Defensa.
Lo mejor del triunfo de Boca sobre Estudiantes
De ahí hasta el final, Estudiantes merodeó el triunfo más que Boca, que deshizo tarde el doble nueve y cambió el 4 pero siguió sufriendo por derecha (displicente reacción de Advíncula que terminó en el tacazo de Palacios al techo del arco) y solo generó peligro -cuándo no- con otro encare de Zeballos y un atajadón del arquero uruguayo, tras un buen pase de Ander Herrera, que volvió a entrar bien y terminaría siendo clave para el triunfazo en La Plata.
El español generó la expulsión de Neves al mostrar que había sido un planchazo a la canilla y sobre la hora presionó y le robó la pelota al recién ingresado Pérez, le picó rápido por detrás a Merentiel, le ganó la posición al juvenil y recibió la infracción sobre la línea del área. Penal por más que lo llore el WhatsApp millonario(que 4 horas después se quedó sin señal post bochorno de Arasa) y gol de la Bestia, que no falla desde los doce pasos en tiempo regular: metió 4 de 4 en Boca. Sus cuatro errados fueron en definiciones por penales.
A diferencia de la semifinal de la Copa de la Liga 2024 (dirigida por ¡Arasa!), esta vez a Boca le cobraron los dos penales que tuvo ante Estudiantes y sumó tres puntos de oro que un rato más tarde pasaron a ser de diamantes, antes del Superclásico en la Bombonera al que el rival llega groggy pese al escandaloso error arbitral que le facilitó un penal para empatar al minuto 100. Ni la falsa guardia alta les queda. El domingo, cueste lo que cueste, Boca.





