¿Cómo mejorar la obediencia de los cachorros, según expertos en comportamiento canino?
Especialistas en comportamiento canino coinciden en cuáles son los métodos más efectivos para guiar a los cachorros en su etapa más desafiante.

La convivencia con un cachorro puede ser un verdadero desafío, sobre todo cuando la energía desbordada se mezcla con curiosidad y poca paciencia. Los especialistas coinciden en que la clave está en entrenar de forma gradual, con premios y mucha constancia. Conocé los detalles.
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Cómo mejorar la obediencia de los cachorros, según expertos en comportamiento canino
El refuerzo positivo y el entrenamiento anticipado son los métodos más eficaces, especialmente durante la “adolescencia perruna”, una etapa marcada por impulsividad y exceso de estímulos. Según los especialistas, esta combinación permite mantener la atención del animal incluso cuando el entorno lo distrae.
Para avanzar en ese proceso, los expertos recomiendan herramientas simples. Una correa larga ayuda a mantener control físico sin quitarle libertad, mientras que las recompensas de alto valor fortalecen la asociación entre el llamado y la obediencia. Para organizar el entrenamiento, conviene apoyarse en una rutina clara que incluya:
- Llamados anticipados antes de que el perro se aleje.
- Premios inmediatos cada vez que responda bien.
- Sesiones cortas y repetitivas para evitar frustración.
- Ambientes con pocos estímulos al comienzo.

Uno de los desafíos más comunes aparece a la hora de comer. Los saltos hacia la mesa suelen reforzarse solos si el perro logra robar comida, por lo que se sugiere trabajar con la técnica de la “manta”: enseñarle a permanecer en una alfombra durante toda la comida familiar, premiándolo mientras se mantenga en su lugar.
Los entrenadores remarcan que muchos dueños subestiman la inteligencia de sus mascotas. Los perros aprenden rápido, detectan patrones y repiten cualquier conducta que les brinde un beneficio, ya sea atención, comida o juego. Identificar esos estímulos y canalizar la energía hacia opciones más saludables permite transformar comportamientos caóticos en rutinas previsibles.





