Cómo cultivar tomates en maceta y lograr una cosecha abundante
Una guía práctica para tener tomates sanos en espacios chicos, desde un balcón hasta una terraza.
Cultivar tomates en casa es más fácil de lo que parece, incluso si tenés poco espacio. Con algunos cuidados clave, es posible tener plantas fuertes y llenas de frutos en una simple maceta. Lo importante es manejar bien la luz, el sustrato, el riego y prevenir enfermedades. Conocé los detalles.
¿Cómo cultivar tomates en maceta y lograr una cosecha abundante?
La clave para una buena producción está en el equilibrio. La planta necesita mucho sol, buena ventilación y un contenedor amplio con tierra de calidad. Además, conviene elegir variedades que se adapten al tamaño de la maceta y aplicar fertilizantes orgánicos de forma moderada.
Los 9 puntos que no pueden faltar para tener éxito con tu tomatera en maceta:
- Ubicación soleada: Necesita entre 5 y 7 horas de sol directo al día. También aireación para evitar hongos.
- Macetas grandes: Para tomates medianos o grandes, se recomiendan recipientes de 25 a 30 litros.
- Sustrato liviano y nutritivo: Mezcla de tierra para huerta con materia orgánica, perlita o arena gruesa.
- Variedades adecuadas: Cherry o determinadas (hasta 1,20 m) son ideales para espacios reducidos.
- Plantación profunda: Enterrar dos tercios del tallo permite que desarrolle más raíces.
- Fertilizantes orgánicos: Harina de hueso, sangre o soja aportan nutrientes clave.
- Riego parejo y controlado: La tierra debe estar húmeda pero no encharcada.
- Poda y pinzamiento: Mejoran la luz, el aire y la distribución de energía en la planta.
- Control natural de plagas: Ajo, jabón neutro o infusión de ortiga ayudan a combatir insectos.
Mantener una rutina de observación diaria es fundamental. Así podés ajustar el riego, detectar plagas a tiempo y saber si la planta necesita más luz o espacio. El tomate es exigente, pero responde muy bien a los buenos cuidados.
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