Lionel Messi y PSG, una historia de chispazos que pasó del amor al odio
El capitán de Inter Miami se rencontró con su exclub en los octavos de final del Mundial de Clubes. Bien lejos quedó la euforia que se apoderó de París en 2021 tras su llegada. Su relación con los hinchas se quebró y todo terminó en silbidos.
Este domingo se escribió, probablemente, el último capítulo de una historia que había empezado con aroma a rosas y terminó con un sabor muy agrio entre Lionel Messi y el Paris Saint-Germain. El astro argentino no pudo computar la inexorable "ley del ex" en el Mercedes-Benz arena de Atlanta y su Inter Miami cayó 4 a 0 por los octavos de final del Mundial de Clubes.
Nada hacía pensar en julio de 2021 que la Pulga y el elenco parisino iban a finalizar su vínculo con remordimiento. Luego del episodio del burofax, y en el marco de una tensa relación con el presidente Joan Laporta, el rosarino se despidió del Barcelona luego de una carrera de 17 años en la misma institución. El anuncio lo hizo con lágrimas en los ojos y visiblemente quebrado, pero todo indicaba que necesitaba un cambio de aires después de varias temporadas sin los éxitos de antaño.
Fue PSG, gracias a las millonarias inversiones de su dueño -Nasser Al-Khelaifi-, el que logró concretar su traspaso. Aunque se hicieron cargo del salario, Messi llegó libre porque había terminado su contrato con el Culé a mediados de 2021. La euforia fue tan grande que miles de hinchas lo recibieron en las afueras del Parque de los Príncipes y en el hotel, todavía con los cuidados que había dejado la pandemia de Covid-19.
Así fue la llegada de Messi a París
El primer gol de Messi en PSG
Había un objetivo en conjunto entre Messi y PSG: ganar la UEFA Champions League. La última del Diez había sido en 2015, de la mano de Luis Enrique, y había sufrido algunos traspies y remontadas desafortunadas con Barcelona. En tanto, desde la llegada del empresario qatarí, en París siempre habían apostado por la compra de figuras rutilantes del momento, como Zlatan Ibrahimović, Edinson Cavani, Neymar y Kylian Mbappé, para triunfar en el ámbito continental, aunque le costaba sobrepasar la barrera de los cuartos de final.
A pesar de que era normal que PSG levantara la Ligue 1 y la Copa de Francia, el primer golpazo se lo llevó en los octavos del máximo torneo del continente. Real Madrid, eterno rival en sus tiempos en Cataluña, le dio vuelta la serie y lo eliminó de forma prematura. Los medios de comunicación franceses salieron con los tapones de punta y hasta hubo un periodista que acusó a los jugadores de "idiotas" por "creerse muy grandes, ir a la Fashion Week (NdeR: el evento de moda más grande del mundo) y usar TikTok".
Tras quedarse con la liga doméstica, la nueva temporada arrancó viento en popa y prometía ser el despegue para PSG. Además, meses más tarde, sus dos máximas estrellas, Messi y Mbappé, fueron protagonistas excluyentes de la final del Mundial de Qatar 2022, con triunfo para la Selección Argentina. Ahí comenzó a quebrarse un poco su vínculo con el hincha y el club en general, porque fue el único que no tuvo un reconocimiento a la altura de lo que había conseguido a sus 35 años, más allá de un pasillo de los compañeros y la entrega de una placa en un entrenamiento. No obstante, el Diez lo entendió, dado que estaba en el país al que había batido en Lusail.
Los problemas se intensificaron, como siempre, en la Champions. Y, otra vez, en los octavos de final. La caída con Bayern Múnich dio pie a las feroces críticas del periodismo local. Le achacaban al rosarino que su nivel en la Ligue 1 era inferior a lo que mostraba en el plano europeo. L'Equipe lo calificó con tres puntos y en el Parque de los Príncipes, al partido siguiente, lo recibieron con atronadores silbidos.
La situación continuó en escala los siguientes meses. La gente lo silbaba cuando jugaba y hasta le dedicaba cánticos particulares. Mientras tanto, Christophe Galtier, su segundo entrenador en PSG tras la salida del argentino Mauricio Pochettino, lo defendía a capa y espada. "Esto es muy personal. Son muy duros. Leo es un jugador que nos ha dado mucho en la temporada. También fue un pasador y un anotador en 2023. No está solo, depende de lo que hagan los compañeros", expresó en una conferencia de prensa.
Si los rumores de partida ya sonaban fuerte poco antes de mediados de 2023, su viaje relámpago a Arabia Saudita por cuestiones comerciales, después de la derrota con Lorient de local, terminó de rubricar el divorcio. La actitud no le gustó a Al-Khelaifi -su país de origen mantenía relaciones bilaterales tensas con el fugaz destino de la Pulga- y decidió sancionarlo por dos semanas. Leo pidió disculpas a través de un video, pero el futuro estaba sellado: no iba a extender su contrato.
Silbidos a Leo Messi en el Parque de los Príncipes
Ni Barcelona ni Newell's Old Boys: Messi eligió Inter Miami, propiedad de David Beckham, para continuar su carrera en julio de 2023. Los últimos meses para su familia fueron complicados, aunque aún no se arrepintió públicamente de haberse puesto los colores parisinos. Su saldo cerró con 75 partidos, 32 goles, 35 asistencias y tres títulos (todos locales).
El cambio le vino bien a ambos. El astro argentino hoy disfruta la calidad de vida de la ciudad costera y se transformó en el máximo goleador histórico de la joven institución estadounidense. PSG dejó de apostar a las estrellas, una vez que Mbappé se fue a Real Madrid, y armó un sólido equipo, comadado por Luis Enrique, que consiguió la tan ansiada y esquiva Champions. Dos años después se volvieron a encontrar cara a cara en la nueva tierra del mesías y relució la gran diferencia que hay entre ambos equipos.
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