El sorpresivo análisis de Valdano sobre el título de la Selección Argentina en México 1986: "Fue un Mundial fácil"
El exdelantero, autor de uno de los goles de la final con Alemania en el Azteca, destacó la actuación del equipo de Bilardo en la Copa del Mundo y tildó de "genio" a Maradona.
Para cualquier futbolista, ser campeón del mundo es lo más parecido a acariciar el cielo con la yema de los dedos. A ganarle al olvido y ser eterno, porque el pueblo nunca se olvida de sus héroes. Y mucho menos el argentino, que suele homenajear a los que abrazaron la gloria en Qatar 2022, México 1986 y Argentina 1978. Jorge Valdano sabe cuánto pesa el máximo trofeo dorado pero, al recordar esta conquista con la Selección, sorprendió con un llamativo análisis.
Autor de cuatro goles en tierras aztecas, uno de ellos en la final con Alemania, el ex delantero detalló los esfuerzos que tuvo que hacer para ganarse la confianza de Carlos Bilardo: “Yo era un jugador que tenía mucha voluntad, que después de los entrenamientos se quedaba una hora más mejorando cosas que me parecían imprescindibles y que no traía de cuna. Por ejemplo la pierna izquierda... y terminé jugando de extremo izquierdo”.
Esto lo llevó a ser una pieza clave de Argentina y titular de principio a fin en un torneo que, según su óptica, no tuvo demasiadas dificultades, excepto por la remontada teutona en el último partido por el título: “Fue un Mundial fácil. No tiramos un solo penal, no jugamos una sola prórroga...".
En diálogo con Marca, explicó la fortaleza de esa Selección: "Era un equipo experto, con gente ya muy madura y con un genio adentro. Pero el hecho de que hubiera tantos jugadores maduros facilitó la convivencia con el genio. Sabíamos cómo poner en valor esa figura absolutamente diferencial que era Maradona”.
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Después de abrazar la gloria en México, Valdano debió interrumpir su carrera en 1987 por una hepatitis mientras jugaba en Real Madrid. Si bien había colgado los botines, Bilardo lo llamó para sumarse al plantel que se estaba preparando para el Mundial de Italia 1990. "Había algo de disparate en la misma aceptación de la oferta. Yo llevaba tres años fuera del fútbol, y además con tratamiento para resolver mi hepatitis. O sea que estaba bastante debilitado. Pero Bilardo me pidió seis meses de sacrificio a cambio del Mundial... y lo acepté”, contó.
Y profundizó sobre aquella puesta a punto agotadora en el país: “Me fui a Argentina para entrenar muy duro, sufriendo mucho, esa es la verdad, y teniendo algunos problemas musculares en el camino, pero cuando ya estaba en Roma, y faltando una semana para el comienzo del Mundial, me dijo que no me veía. Así que me quedé en Italia, pero para comentar los partidos con la Cadena Ser y sin campeonato”.
Aquel pulgar abajo del Doctor los hizo distanciarse en aquel entonces, aunque el ex atacante le sigue guardando un profundo cariño y respeto: “La verdad es que nunca más hablé con Bilardo, pero el nudo del 86 era tan fuerte que no logré no quererlo”.
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