Brilló en Argentina, Maradona le enseñó a patear tiros libres y hoy lucha en el ascenso paraguayo
Un gran mediocampista y con un remate infernal, quien supo hacer historia en Lanús, milita en Encarnación FC en su país de origen, en el último tramo de su carrera futbolística.

La garra y el corazón sobra en el equipo en el que esté; los rivales temen cuando se para frente a una pelota, listo para lastimar con una pegada infernal, habilidad que adquirió gracias a las brillantes indicaciones de Diego Maradona. Eso genera Víctor Ayala, quien supo romperla en Lanús en su primer paso por el fútbol argentino, con una personalidad y un juego que colaboraron a levantar la única Copa Sudamericana del club. Ahora, con 37 años, lucha en Encarnación FC, de la Segunda División del Fútbol de Paraguay.
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Mientras lucha en su país de origen en un equipo que ocupa el décimo puesto de la tabla, que recientemente fue eliminado de la Copa Paraguay y donde no hace pie en el último tiempo, la gente lo recuerda por su gran historia con este deporte.
Salido del Sport Colombia, de la ciudad de Fernando de la Mora, donde debutó a los 18 años en 2006 en la Tercera División y contribuyó al Ascenso en 2007, ya llamaba la atención por su porte adentro de la cancha. Esta capacidad despertó el interés en Libertad de Paraguay, club al que arribó en 2009 y en el que se mantuvo hasta 2012 después de 112 partidos. Se destacó en la Copa Libertadores en las ediciones 2011 y 2012, llegando en ambas ocasiones a los cuartos de final. Como no podría haber sido de otra manera, varios clubes posaron sus ojos en él, pero fue Lanús el próximo destino, el lugar ideal, donde terminó de romperla.
164 encuentros y 27 tantos para el mediocampista ofensivo que vistió la camiseta granate hasta 2016. Campeón y figura indiscutida de la Copa Sudamericana 2013 en el equipo de los Barros Schelotto, protagonista de un hecho histórico para la institución y goleador en la final ante Ponte Preta. Fue ovacionado por los hinchas en muchas ocasiones, pero hubo un gol que desató la locura, también, de los fanáticos del fútbol argentino: una pelota parada y un remate impresionante de larga distancia movió la red de Banfield en el Clásico del Sur de la edición 2016. En ese mismo año, representó otro hito para el Granate: levantó el título de la Primera División, el segundo en el palmarés del club.

Ayala y un golazo para el recuerdo en el Clásico del Sur

Se fue de Argentina, pasó por Al-Nassr de Arabia Saudita y Barcelona de Ecuador y pegó la vuelta en 2018 para vestir la de Gimnasia y Esgrima La Plata. Allí formó una gran relación con Maradona, en la época en la que dio sus últimas indicaciones como DT. Disfrutó de las enseñanzas y perfeccionó su gran habilidad para los tiros libres. "Es impresionante su pegada, en la semana estuvimos pateando y yo le dije: 'Parate un segundo antes'", contó el ídolo máximo después de un partido en el que Ayala convirtió dos goles de pelota parada y le dio la primera victoria al Diego en su ciclo.

Jugó en seis clubes más antes de volver a Paraguay, donde empieza a cerrar su ciclo profesional. A pesar de que su fútbol ya no se ve en las grandes pantallas, guarda en la suela el talento y las palabras del mejor jugador de todos los tiempos, a quien supo homenajear años más tarde. Lleva consigo el mejor homenaje en vida, el recuerdo feliz de los hinchas, sobre todo granates, que un día supieron disfrutar de su fútbol.
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