La dolorosa despedida de Lewis Hamilton a su perro Roscoe
El piloto británico contó cómo fueron los últimos días de Roscoe, su inseparable bulldog inglés, y la difícil decisión final.
El siete veces campeón de Fórmula 1, Lewis Hamilton, confirmó en sus redes sociales la muerte de su perro Roscoe, quien lo acompañó durante más de una década en las pistas y en su vida personal. El bulldog falleció el 28 de septiembre tras atravesar una dura internación. Conocé los detalles.
Según relató el propio piloto, Roscoe sufrió una neumonía grave que lo obligó a estar cuatro días en coma y conectado a un respirador. Pese a los esfuerzos médicos, la evolución fue negativa y los especialistas recomendaron la eutanasia. Hamilton, devastado, tomó la decisión y despidió a quien definió como “su mejor amigo”.
La enfermedad que afectó a Roscoe
- Diagnóstico: neumonía severa con dificultades respiratorias.
- Internación: cuatro días en terapia intensiva con soporte vital.
- Complicaciones: paro cardíaco y posterior coma.
- Decisión final: eutanasia indicada por el equipo veterinario ante la falta de respuesta.
- Edad del perro: 12 años.
En un extenso mensaje, Hamilton agradeció los mensajes de apoyo recibidos y destacó que Roscoe nunca dejó de luchar. Recordó también que adoptarlo fue “la mejor decisión de su vida”, valorando los momentos compartidos en cada etapa de su carrera.
La neumonía en perros es considerada una urgencia veterinaria. Puede presentarse con tos, fiebre, fatiga y problemas para respirar. Su tratamiento incluye antibióticos, oxígeno y hospitalización, aunque en casos avanzados, como el de Roscoe, las probabilidades de recuperación son bajas.
Con su despedida, Hamilton mostró el costado más humano de un piloto acostumbrado a la velocidad, pero que fuera de la pista vivió la pérdida de un compañero inseparable.
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