¿Cómo cuidar una planta de menta en casa para que crezca fuerte y sana?
La menta es fácil de cultivar en casa y con algunos cuidados simples podés disfrutarla fresca todo el año.
La menta es una de las plantas más fáciles de cultivar en casa, ya sea en maceta o en el jardín. Su aroma intenso y su frescura la convierten en un aliado ideal para tés, tragos y comidas. Para que crezca fuerte y sana hay que seguir algunos pasos clave. Estos son los mejores secretos.
¿Cómo cuidar una planta de menta en casa para que crezca fuerte y sana?
El secreto principal es darle mucha luz pero sin sol directo, porque sus hojas se pueden quemar. También necesita un riego frecuente, pero evitando que la tierra se encharque. Lo ideal es que siempre esté húmeda, no seca ni empapada.
Los cuidados básicos de la menta son:
- Maceta ancha y profunda, ya que sus raíces se expanden rápido.
- Riego constante, manteniendo la tierra húmeda.
- Luz indirecta, mejor cerca de una ventana.
- Poda regular para que no se espigue y produzca más hojas.
- Tierra fértil y aireada, con buen drenaje.
Además, conviene cortarle las flores cuando aparezcan, porque si florece deja de producir hojas nuevas con la misma fuerza. Con una poda leve y constante, la planta se mantiene vigorosa y podés cosechar menta fresca durante meses.
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