Un estudio reveló hasta cuánto están dispuestos a pagar los usuarios por un videojuego
Un informe reciente expone que la mayoría de los jugadores fija su límite de gasto y que la mayoría de los títulos triple A están por encima de ese monto.

El debate por el precio de los videojuegos vuelve a encenderse mientras los estudios apuntan cada vez más alto, pero los jugadores parecen marcar su propio techo. El público, según nuevos datos, está dispuesto a pagar como máximo 25 dólares por una propuesta original, cuando la mayoría de los títulos triple A están bastante por encima.
Un estudio reveló hasta cuánto están dispuestos a pagar los usuarios por un videojuego
El estudio indica que el mejor rendimiento comercial en PC se concentra en juegos económicos, aun cuando el precio promedio apenas bajó en los últimos años. La gran mayoría de lanzamientos que más unidades venden se ubican por debajo de esa barrera psicológica, lo que confirma que el mercado ya no acompaña la tendencia de subir valores hasta los 70 o 100 dólares.
Para entender este fenómeno, el informe destaca el crecimiento del catálogo indie, donde abundan experiencias baratas, rejugables y con comunidades muy activas. Esa mezcla genera un escenario en el que los usuarios comparan constantemente lo que ofrece un título de 10 o 15 dólares frente a uno mucho más caro, incluso si es AAA.
En ese contexto, el reporte remarca tres puntos que explican por qué los jugadores frenan su gasto:
- El valor percibido del juego compite con opciones baratas que ofrecen cientos de horas.
- La saturación de lanzamientos obliga a elegir propuestas accesibles para probar más títulos.
- Las rebajas constantes de catálogos históricos hacen que muchos clásicos baratos se sientan como novedades.
Según el informe, cada vez resulta más difícil que un juego completamente nuevo supere los 25 dólares y logre tracción, salvo que tenga detrás una franquicia reconocida o un estudio con reputación sólida. Para la enorme mayoría de usuarios, el límite ya está claro y el mercado empieza a adaptarse.





