Versiones cruzadas y lesiones: sigue el escándalo tras la batalla campal en la pelea de Silva con Freitas
La trifulca en San Pablo expuso la falta de control en una exhibición que terminó con heridos, acusaciones y secuelas físicas para dos leyendas del combate.

Una velada que prometía ser una fiesta para los fanáticos del boxeo y las artes marciales mixtas terminó convertida en un episodio bochornoso. La pelea de exhibición entre Wanderlei Silva y Acelino “Popó” Freitas en San Pablo derivó en una trifulca generalizada que dejó fracturas, puntos de sutura, declaraciones encendidas y una polémica que sigue sumando capítulos.
La situación se desmadró en el cuarto round, cuando el árbitro decidió descalificar a Silva por una serie de infracciones, entre ellas varios cabezazos que elevaron la tensión en el cuadrilátero. La decisión arbitral desató la furia del equipo del excampeón de MMA y terminó en una batalla campal entre ambas esquinas.
En medio del caos, Rafael Freitas –hijo del ex campeón mundial de boxeo– le asestó un golpe a Silva, que ya estaba fuera de combate. El brasileño quedó inconsciente sobre la lona y tuvo que ser trasladado de urgencia a un hospital. Allí se le diagnosticó una fractura de nariz y cortes faciales que necesitaron sutura. Desde el rincón de Silva, el ex UFC Fabricio Werdum fue tajante: “Las imágenes no mienten, fue un acto de maldad”.
La batalla campal en la pelea entre Freitas y Silva

Ya recuperado, Wanderlei Silva rompió el silencio desde sus redes sociales. En un video publicado en Instagram, responsabilizó al equipo rival por el ataque: “El equipo de Popó invadió el ring después del resultado. Se abalanzaron sobre nosotros, nos hicieron señas obscenas y nos insultaron, como lo habían hecho toda la semana”. El ex luchador aseguró que solo intentaba separar y que fue sorprendido por golpes que lo dejaron con el ojo lastimado: “Pensé que fue un acto muy triste”.
Silva relató además que sufre un fuerte dolor de cabeza y una lesión ocular que le impide abrir el ojo derecho. El expeleador viajó a Curitiba para someterse a estudios neurológicos y oftalmológicos, con el objetivo de descartar secuelas graves tras la golpiza.

La otra versión no tardó en llegar. Desde el entorno de Popó Freitas aseguran que la agresión fue iniciada por el rincón de Silva. En declaraciones al medio Globo, Rafael Freitas explicó que actuó en defensa propia: “Vi cómo atacaban a mi padre y a mis hermanos, y solo pensé en defender a mi familia”. Según su testimonio, el conflicto comenzó con la intervención del hijo de Silva, su entrenador Andre Dida y el propio Werdum.
El propio Acelino Freitas también resultó herido y tuvo que ser operado por una fractura en la mano derecha. La cirugía se realizó en Salvador, y aunque las tomografías descartaron lesiones en el cráneo, el ex boxeador sigue bajo observación médica, según confirmó su oficina de prensa.
El caos fue transmitido en vivo, y las imágenes del cuadrilátero convertido en un ring de lucha libre recorrieron el mundo. Golpes por doquier, empujones y rostros ensangrentados sellaron una noche negra para el deporte de combate. Más allá de la victoria oficial para Freitas, la escena fue repudiada por gran parte de la comunidad del boxeo y el MMA.
Hasta el momento, ni el Consejo Nacional de Boxeo de Brasil (CNB) ni la promotora Spaten Fight Night anunciaron sanciones. El combate, que originalmente iba a enfrentar a Silva con Vitor Belfort, terminó de la peor manera, con dos leyendas golpeadas.
¿Fanático del box? Enterate todas las noticias a través de Boxeo de Primera en Zeapp Sports. Seguí nuestra página en Facebook , nuestras cuentas de Instagram y Twitter, el canal de YouTube o Google News. También podés registrarte gratis e indicár tus preferencias para recibir notificaciones en tu browser o bajate nuestra APP (disponible en Android y próximamente en iOS).

No te pierdas nada